El F.C. Barcelona ha caido eliminado, en la semifinal de la Liga de Campeones gracias a un gran Inter de Milán. Los italianos, han realizado una gran eliminatoria, que han resuelto con un resultado global de 3-2 para los hombres de José Mourinho. El Inter hizo su partido en el Camp Nou, después de la ventaja que tenía del partido de ida en San Siro en el que los nerazzurri se impusieron 3-1 al conjunto de Pep Guardiola. El equipo italiano salió al campo al más puro estilo ¨cantennaccio¨ a defender y más aún después, de la expulsión de Thiago Motta en el minuto 34, lo que dejaba a los de Mourinho con un hombre menos. El Barça dice de esta manera adiós a su sueño de esta temporada que era llegar a la final del Santiago Bernabéu del próximo 22 de mayo.
El Barcelona lo intentó de todas las maneras, pero le fue imposible romper el muro infranqueable que había ideado Mourinho hasta el minuto 84, cuando Piqué subió al ataque y se quedó sólo delante de Julio Cesar, al que hizo un reverso precioso para marcar el único tanto del partido. Fue todo un golazo del central catalán que lo hubiera podido firmar cualquiera de los mejores delanteros del mundo, pero parece que estaba ligeramente adelantado a la defensa del Inter y el gol no debió subir al marcador, por fuera de juego. Marcó otra vez el Barça por medio de Bojan pero esta vez si fue anulado correctamente por mano previa de Touré Yaya.
La polémica del partido estuvo al final, cuando una vez concluido el encuentro con un Mourinho enloquecido celebrando el pase a la final de la Champions junto a sus jugadores, encendieron los aspersores del Camp Nou para que el Inter de Milán no celebrase la victoria en el césped, algo lamentable de lo que se ha hecho eco la prensa internacional y que no se corresponde con la imagen de un gran club como es el Barça.
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